viernes, 20 de junio de 2014

DESPEDIDA

Este curso académico me costó bastante arrancar porque mis emociones estaban desordenadas, lo explico aquí, y también me ha costado mucho cerrar porque el orden en el que se encuentran ahora es nuevo para mí.

A veces ser profesora me parece la profesión más maravillosa del mundo, es excitante, sorprendente, estimulante, divertida, nunca se deja de aprender, de todo y de todos. Creo que quien conozca a alguien en esta profesión sabe bastante de esto y sino, está lo que si sabe todo el mundo: tenemos dos meses de vacaciones (no tres como piensan otros tantos).
En muchas ocasiones se convierte en un trabajo como otro cualquiera: papeleo, rutinas de ir, entrar, salir, cambiar de grupo, reuniones, normas, cumplir objetivos, actividades, diferencias con compañeros, momentos de complicidad, horas aburridas, golpes de ingenio, timbres, alicientes, disgustos, cansancio, ilusión...
Y otras veces es duro, difícil y en alguna ocasión desalentador ¡Cuántas veces este año me he sentido impotente y no he sabido cómo gestionar una situación en la que, claro como no, estaban saltando como chispas emociones adolescentes (bueno y las mías)
Es doloroso no saber si se ha  tomado la decisión adecuada y quedarte con la sensación de haber hecho daño, a alguien más débil que tú.

Este curso me he cuestionado en exceso qué es la educación, para qué educamos, cómo lo hacemos, qué queremos conseguir... A la formación que hemos recibido en el centro desde el CFIE sobre Nuevas Metodologías y Educación Inclusiva con Beatriz Gallego (una profesional de lujo) he sumado las jornadas de Escuela de Educación Disruptiva en la Fundación Telefónica en Madrid con la  rEDUvolution de María Acaso como leitmotiv, el Seminario sobre Escuela Libre con el colectivo Wayra en la facultad de Educación y el decepcionante Evento Savia en Valladolid sobre educación a cargo de la editorial SM , bueno y unas cuantas lecturas, Howard Gadner y sus Inteligencias Múltiples, las Pedagogías Invisibles, El Elemento de Ken Robison, PNL, Inteligencia emocional...
Sin embargo no he conseguido obtener respuestas sino tener muchas más dudas sobre qué es la educación, me he empachado de teorías y de ideas y  eso me ha dificultado ponerlas en práctica porque además en ocasiones son contradictorias.

Pero no todo es negativo, he dudado mucho, sí, y me he equivocado en muchas ocasiones, también, pero ha sido un año, de nuevo, fructífero y me quedo con lo que me han recordado algunos de mis alumnos casi a diario y me ha costado mucho ver por estar atenta a otras cosas: cuando se es feliz se aprende más y mejor. 

Gracias a todos y cada uno de mis alumnos de este curso 2013-2014


Este el trabajo de unas de mis más mejores alumnas, Irene y María, sino te encuentras mejor después de ver el vídeo prueba otra vez y sino otra... funciona!

*Alumn@s esta es vuestra tarea del verano, tendrá mejor nota en Septiembre el que más veces lo haya visto y bailado